Siempre queremos lo mejor para nuestros hijos. Esperamos que nunca experimenten lesiones graves o problemas de salud crónicos. Sin embargo, alrededor de 210.000 niños y adolescentes tienen diabetes. Puede ser todo un desafío lograr que su hijo siga una dieta y un estilo de vida saludables para controlar esta afección, pero su salud y calidad de vida dependen de ello.
Fomente una dieta saludable
Alentar a su hijo a comer una dieta saludable es uno de los pasos más importantes y desafiantes que debe tomar en el camino de la diabetes de su hijo. Enséñele a su hijo sobre los alimentos «buenos» y «malos» para el azúcar en la sangre, comenzando con los carbohidratos.
El pan blanco, el arroz y la pasta, por ejemplo, se procesan a partir de harina blanca y se sabe que aumentan significativamente los niveles de glucosa. Deben estar restringidos. Enséñele a su hijo a elegir carbohidratos saludables de los cereales integrales: cebada, arroz integral, quinua. Aproximadamente el 60% de la dieta de su hijo debe ser carbohidratos. Concéntrese en la importancia de comer frutas y verduras frescas.
Incluso es posible que desee incorporar la misma dieta saludable en su vida.
Ayude a su hijo a crear un horario de comidas
Los picos drásticos del azúcar en sangre de su hijo pueden ser peligrosos. Puede prevenir altibajos extremos estableciendo un horario de comidas para su hijo. Idealmente, su hijo debe comer dentro de una hora y media después de despertarse y cada cuatro a seis horas después de eso. Un bocadillo bajo en carbohidratos está bien.
Un horario de comidas puede ayudarlo a controlar mejor la diabetes en adolescentes y niños. Debe sentar las bases para asegurarse de que su hijo aprenda buenos hábitos para incorporar de por vida.